YA TIENES TU PLAN DE ACCION?
El plan de acción:
Plantear una meta y ponerla por escrito, fijar limites de tiempo, identificar los obstáculo que se habrá de afrontar y reforzar las metas con imágenes.
Todo esto es muy importante pero insuficiente si no se diseña y se implementa un plan de acción. Una planeación adecuada contribuye decisivamente en el logro de las metas.
Este asunto es tan importante que le dedicaremos varios días a su creación después que usted haga el ejercicio de definir sus metas personales.
Vamos a definir tus metas:
Tome lápiz y papel y escriba cuales son sus metas personales por áreas: familiar, económica, laboral o profesional, académicas y espiritual.
Responde:
1. ¿Qué es lo que deseas obtener?
Define exactamente que es lo que esperas ver, sentir y palpar cuando hallas alcanzado tu objetivo, y siempre expresado en positivo.
2. ¿Cual es con exactitud la meta que deseas alcanzar?
La mejor forma de expresar un objetivo es ir a la meta terminada, ver todo el panorama, familiarizarte con esa imagen y desde allí, hacer un fraccionamiento en el tiempo.
3. ¿Que será diferente cuando alcance la meta?
Saber como va a afectar tu vida la meta, las cosas que van a cambiar, y que estas dispuesto a dejar de hacer o que no quieres perder.
4. ¿Que estas dispuesto a sacrificar por esta meta?
Mucha veces se evalúa un proceso sin mirar el costo, para muchas personas ver el resultado si darse cuenta cuantos sacrificios hay detrás.
5. ¿Como sabré que alcance mi meta?
Tan importante como el punto de partida es el punto de llegada no olvides, celebrar cuando alcances a meta.
Requerimos un objetivo que nos enfoque y de dirección, que nos haga saber exactamente hacia donde dirigir nuestros pasos, y como empujar y canalizar nuestra energía y motivación a darle cada día parte de nuestro tiempo.
No dejes que se valla el mes, no recibas un nuevo año sin definir tus objetivos, pero mucho menos sin un plan de acción que haga viable tus metas y objetivos.
Todos tenemos sueños y aspiraciones que deseamos alcanzar y que aun no lo hemos hecho porque no le dedicamos la suficiente energía o porque simplemente no tenemos la fe suficiente en que lo podemos alcanzar y eso nos hace sabotear nuestros progreso.
Haz del 2022 un año productivo, inicia desde el primer día una rutina de cambio de hábitos, que te vas a imponer, no como una obligación, sino con mucha alegría y entusiasmo pues es lo que deseas alcanzar y lo que llena tu vida.
Encuentra en este año tu verdadero propósito y vive tu ikigai.
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